La empresa de productos cárnicos y lácteos Grupo Bafar no se amedrentó con la crisis y ha crecido a doble dígito en los últimos cuatro trimestres; además de aumentar y diversificar sus exportaciones al extranjero e innovar en negocios como la producción de nueces. Parte de este éxito puede rastrearse a una sólida estrategia tecnológica afianzada en la nube, el IoT y la automatización, elementos que Hipólito Velázquez, CIO de la compañía, tuvo que acelerar aún más frente a los retos impuestos por el confinamiento.
Grupo Bafar nació en Chihuahua hace 37 años y hoy cuenta con presencia en toda la República y en el sur de Estados Unidos. La empresa no tuvo que detener sus operaciones en ningún momento de la pandemia, pero Hipólito Velázquez relata que no fue fácil. A pesar de contar desde hace tiempo con herramientas de colaboración y comunicación remota como Microsoft Teams y Office 365, no se usaban hasta que llegó el confinamiento. “Chihuahua tiene una cultura fuerte de realizar las cosas cara a cara. Tuvimos que esforzarnos por cambiarla”.
El CIO, que lleva 14 años dirigiendo los esfuerzos tecnológicos del Grupo, ha ejecutado proyectos como la implementación exitosa de SAP, la reorganización de los equipos de soporte de mid y back office y la automatización robótica de almacenes y plantas, obteniendo eficiencias operativas y ahorros en todos los casos.
Afortunadamente, este trabajo significó que al comenzar la crisis sanitaria gran parte de la operación estaba ya en la nube. No fue necesario hacer grandes esfuerzos ni inversiones para poner al día las aplicaciones y herramientas. Pudieron volcar su energía a los problemas urgentes de conectividad y a reorganizar la cultura.
“El esquema transaccional ya lo teníamos en la nube, así como nuestro procesamiento de datos, nuestro ERP y muchos otros de los sistemas. Gracias a esto pudimos continuar nuestro business-as-usual. El principal problema lo tuvimos a nivel de cultura”, indica Velázquez, quien tenía claro que la transformación no se conseguiría solo con implementar herramientas, sino que habilitando el trabajo en contextos diversos, con oficinas móviles y con proyectos de innovación que avancen interconectados y sin miedo a romper cosas. “Nosotros hacemos pruebas de concepto que salen al mercado rápidamente, que se ensayan en acción y dejando espacio para cometer errores. Si nos equivocamos en algo no hay problema: regresamos al tablero y probamos de nuevo”, agrega.
Además de la manufactura y distribución de productos de consumo, Grupo Bafar también cuenta con tiendas propias. Esto les permitió incursionar rápidamente en el eCommerce durante la crisis sanitaria, con un portal que ya está generando ventas significativas.
“La nube nos da la flexibilidad para concretar estos proyectos con velocidad y sin contratiempos. Ya no pensamos más en centros de datos”, concluye.