La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) no pagó ningún rescate por el ataque ransomware del que fue víctima a finales de octubre, afirmó el subsecretario Rogelio Jiménez Pons.
“El tipo de virus no era un hackeo, era más que nada una especie de encriptamiento para extorsionar y decirte: ‘¿Quieres que te libere? Págame’”, señaló luego de insistir en que “no se pagó nada”.
Tras participar en la inauguración de la conferencia Mobile 360 y el Congreso Latinoamericano de Transformación Digital, Jiménez Pons, a pregunta expresa, reconoció que sí hubo una afectación.
“Tuvimos que parar muchas máquinas”, dijo, aunque aseveró que no se frenaron los trámites, sino que “se han priorizado” y confió en que “para enero ya estaremos completamente en acción”.
Explicó que, tanto el equipo de la SICT como de las empresas que la apoyan, trabajan en la limpieza de las computadoras afectadas.
“Se han tenido que ir limpiando una por una, un proceso que ya lleva unas semanas. Se están reformateando, se quitan todos los virus y son equipos que ya se pueden reutilizar”, comentó.
10% de equipos tenía información privilegiada
El subsecretario de Transportes explicó que hay un grupo de computadoras, de los 110 equipos que se reportaron como afectados, que “sí tienen información privilegiada [y en las] que se está haciendo una especie de salvamento. Cuesta mucho. Por computadora se hace”.
Indicó que estos dispositivos representan cerca de 10% de todas las que tenían y es en las que “estamos ciudadano no perder la información vital de todas las dependencias y direcciones [que] sí había”.
Jiménez Pons destacó la detección rápida y oportuna del ataque. “Se desconectó el internet y ya no se contaminó más. Fue un fin de semana y eso fue la gran ventaja”, dijo.
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SICT, tras ransomware, dice que había respaldos
El funcionario federal agregó que “casi todo, no todo, tenía respaldo físico: documentos [impresos]. El chiste es también la accesibilidad de ellos”.
Confió en que no se filtró información, pero señaló que “hay que estar seguros hasta que tengas todos los pelos de la burra en la mano y eso va ser en enero. Creo que no ha pasado nada”.