Incentivar una competencia efectiva en el rubro de telecomunicaciones, brindar conectividad universal fomentando que 50 millones de mexicanos más tengan acceso a Internet y dedicar más recursos a investigación y desarrollo que sus antecesores son algunos de los retos que tiene el próximo Gobierno de México para mejorar en materia de IT.
Comenzando por los retos, la nueva administración enfrentará un escenario de conectividad en el que, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 71.3 millones de mexicanos mayores de seis años usaron internet durante el 2017, cifra que representa 63.9% del total de la población.
En cuanto a la competencia en telecomunicaciones, Ernesto Piedras, director general de The Competitive Intelligence Unit, indica en una columna de opinión que a cinco años de que entrara en vigor la Reforma en esta materia, aún hay que trabajar en incentivar la competencia, porque a la fecha el principal operador –denominado Agente Económico Preponderante (AEP)– da servicio a seis de cada 10 usuarios de telecomunicaciones.
Por otro lado, en lo que se refiere a la inversión en el PIB en investigación y desarrollo, Edgar Fierro, director general de la consultora IDC, señaló a Expansión que los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) invierten en promedio 2.4% en este rubro; mientras que en México, durante los dos sexenios anteriores, se destinó menos de 1% a investigación y desarrollo: 0.6% en el gobierno de Enrique Peña Nieto y 0.43% en el de Felipe Calderón.
Propuestas en la mesa
Esta semana, Abel Hibert Sánchez, asesor económico de López Obrador, señaló en un comunicado que el próximo Gobierno contemplará mecanismos como la creación de un fondo de cobertura social de telecomunicaciones y el otorgamiento de nuevas concesiones sociales, así como el uso eficiente de la Red Compartida, con lo que se lograría una interconexión favorable para los no conectados. El objetivo es que 50 millones de mexicanos que hoy no tienen acceso a internet lo consigan.
Según Hibert, el punto de desarrollar una economía digital en México es impulsar las inversiones en el sector eliminando las barreras para el despliegue de infraestructura en el país, así como revisar con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) los esquemas que existen para compartición de infraestructura, el esquema de cobros por uso del espectro radioeléctrico, modificar el sistema de compras gubernamentales y revisar un segundo apagón analógico de 2G y 3G.
Por su parte, Javier Jiménez Espriú –quien está propuesto para encabezar la Secretaría de Comunicaciones y Transportes– indicó a El Heraldo que existe el compromiso de llevar internet de banda ancha con buena calidad a esos ciudadanos luego de “desarrollar infraestructura con los concesionarios”.
Para dicho desarrollo, señaló Jiménez, se buscarán asociaciones del Gobierno con la iniciativa privada. Mientras tanto, para llevar las telecomunicaciones a lugares remotos, será el propio gobierno quien lo haga con recursos públicos.
En mayo pasado, la organización Abre más los ojos, publicó Pejenomics, un manual para explicar las propuestas económicas de Andrés Manuel López Obrador. En él se menciona que para dar impulso al emprendedor se apoyaría su incursión en nuevos sectores como la manufactura 3D y la nanotecnología; además de que se buscaría fomentar el desarrollo de alta tecnología en sectores como energías limpias, programación y robótica.
La expectativa y la esperanza general es que haya mayor competitividad, desarrollo, innovación y emprendimiento en el futuro del país en lo que toca a las tecnologías de la información y comunicación.
