Aruba Networking anunció la integración a su oferta en México de los portafolios de Athonet y Axis Security, dos de las empresas que adquirió HPE, su empresa matriz, apenas este año.
Con la primera podrá ofrecer redes privadas 5G, mientras que con la segunda sumara una solución de Perímetro de Servicio de Seguridad (SSE, por sus siglas en inglés) que le permitirá brindar una arquitectura completa de Servicio de Acceso Seguro a la Nube (SASE).
El director general para México de HPE Aruba Networking, Everth Hernández, explicó que en la parte de Athonet es una estrategia más a mediano plazo.
“Hay todavía algunos temas que no se han terminado de solventar en el país alrededor de la liberación de espectro para que las empresas puedan, sin necesidad de ir a subarrendar canales que tienen los operadores que pagaron las concesiones, montar una infraestructura privada de 5G”, dijo.
Agregó que eso limita el tipo de cliente que puede instalarlo (“un grupo empresarial con grandes capacidades”) y alenta el proceso de adopción. Pero aseguró que cuando resuelva el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), donde se discute el tema, “sí creemos que esto va a volar relativamente rápido”.
Axis desaparecerá como marca
A diferencia de la adquisición de la italiana Athonet, que aún no concluye, y por lo que aún HPE Aruba Networking no puede comercializar directamente sus soluciones —esperan suceda en septiembre—, en el caso de la israelí Axis Security la operación cerró más rápido.
De hecho, a México la solución que incluye Zero Trust Network Access, Cloud Access Security Broker, Secure Web Gateway y Digital Experience Monitoring llegará ya integrada bajo un nuevo nombre: “Edge Connect SSE”.
“A SASE, en específico la parte de SSE, que fue lo que compramos, lo veo de una adopción rapidísima en México”, comentó Hernández, quien señaló que los presupuestos que se tenían para la compra de equipos de seguridad tradicional (perimetrales, firewalls concentradores de VPN, etcétera) cambiará de destino.
Según sus cálculos internos, dicho mercado de ciberseguridad tradicional valía entre $160 millones y $170 millones de dólares en México. “Ese dinero, eventualmente, con los crecimientos año tras año, se va a mover hacia un modelo de seguridad en la nube”, detalló.