AT&T selló la compra de Time Warner por $85,400 millones de dólares, en uno de los mayores acuerdos de empresas de comunicación en la historia. Esto incluye la integración de Warner Bros., HBO y Turner a la firma de telecomunicaciones, lo que se proyecta cambiará de forma significativa el panorama del entretenimiento actual, oponiéndose directamente a nuevos actores como Netflix, Hulu y Amazon.
El plazo para completar la fusión se vencía la semana próxima, pero el Departamento de Justicia indicó ayer que no le pediría al tribunal que postergara la unión de ambas empresas mientras sopesaba apelar la decisión del juez respecto a si no existian elementos que contravinieran las leyes de monopolio o similares. El juez federal de distrito, Richard Leon, emitió su fallo el martes contra el intento del gobierno de bloquear la enorme fusión, que podría ser perjudicial para la competencia.
Hoy, en un comunicado de prensa, Randall Stephenson, director general de AT&T, afirmó que esta unión combinará las fortalezas de Warner Bros., HBO y Turner con las de AT&T para hacer llegar de manera directa al consumidor una experiencia de entretenimiento diferenciada, de alta calidad con movilidad.
De acuerdo con el ejecutivo, el futuro de los medios de entretenimiento converge rápidamente en los elementos para transformar la distribución, la forma de pagar, consumir y crear video, “algo que ahora ofrece AT&T”, afirmó Stephenson.
Luego de la fusión, AT&T ofrecerá al mercado: Contenido premium, distribución directa al consumidor (D2C, por su abreviatura en inglés) de servicios de banda ancha, telefonía móvil, video streaming y TV en Estados Unidos, telefonía móvil en México, televisión en América Latina, contenido digital D2C de HBO NOW, Boomerang, FilmStruck y CNN.com, además de redes de alta velocidad –tanto inalámbricas como de fibra óptica.