Un ataque DDoS provocó que ChatGPT de OpenAI presentara interrupciones periódicas el jueves, un día después de que la empresa reportó una de las mayores caídas del chatbot impulsado por inteligencia artificial (AI, por sus siglas en inglés), al estar sin servicio 90 minutos.
“Estamos lidiando con interrupciones periódicas debido a un patrón de tráfico anormal que refleja un ataque DDoS. Seguimos trabajando para mitigar esto”, escribió OpenAI el jueves en su página de estatus.
Desde el miércoles pasado, los problemas se registraron en las herramientas y servicios de la empresa, incluida la API utilizada por más de dos millones de desarrolladores.
“Entre las 5:42 a. m. y las 7:16 a. m. PT [tiempo del Pacífico], vimos errores que afectaron a todos los servicios. Identificamos el problema e implementamos una solución. Ahora estamos viendo respuestas normales de nuestros servicios”, dijo ese día OpenAI.
Sin embargo, el jueves aún se registraban fallas. “Aún seguimos viendo interrupciones periódicas en ChatGPT y la API. OpenAI informó por tarde que el incidente ya había sido resuelto y el estado de sus servicios habían vuelto a la normalidad.
La compañía señaló que la información de sus clientes no se había visto comprometida.
Más de 92% de las empresas Fortune 500 utilizan la plataforma, frente al 80% en agosto, y abarcan industrias como servicios financieros, aplicaciones legales y educación, dijo el lunes a los periodistas la directora de tecnología de OpenAI, Mira Murati.
El ataque también sigue al primer evento presencial de OpenAI el lunes pasado, donde la compañía anunció que había superado los 100 millones de usuarios activos semanales.
También anunció GPT-4 Turbo, su modelo de inteligencia artificial más poderoso hasta el momento, y una nueva opción que permite a los usuarios crear versiones personalizadas de ChatGPT.