Sin dar nuevos detalles sobre su primera región de nube en el país, próxima a abrirse en Querétaro, el director general de Google Cloud México, Julio Velázquez, aseguró que para la empresa esta será suficiente para atender la demanda de los próximos años, incluso con el nearshoring.
Días después de que Oracle presumió ser el primer proveedor de nube hiperescala con dos regiones en territorio mexicano, Velázquez descartó que piensen en seguir ese camino. “No veo en el corto-mediano plazo algo para hacerlo”, afirmó.
En un encuentro con medios de comunicación, con motivo del segundo Google Cloud Summit México, comentó que actualmente su operación no se ve limitada por la falta de esta región y cuando se inaugure “los tiempos de respuesta y nivel de servicio van a ser los mismos” con los que ya trabajan.
Hoy en día, dijo, “las comunicaciones, los enlaces, las soluciones de interconexión están preparadas de manera tal que no lo veo”, insistió. “Ojalá estuviéramos hablando de eso, porque se trataría del boom de muchos clientes”, agregó.
Según el ejecutivo, la única necesidad para tener otra región “son soluciones muy particulares que requieren niveles de latencia muy bajos”.
Abundó que cuando la industria 4.0 y el IoT realmente despeguen, los sensores estén por todos lados y haya necesidad de analítica en tiempo real, “ahí sí creo que vamos a tener que acercar otras regiones. Pero aún estamos lejos de eso”.
El impacto
Interrogado sobre qué cambiará con la apertura de la que será la tercera región de nube de Google Cloud en América Latina, Julio Velázquez dijo que “primero vamos a crear una entidad legal para facturar los servicios en México, un requerimiento particular por cuestiones contables o fiscales”.
Añadió que a los clientes ayudarán a que se ubique en el país lo que necesiten que “corra en México y que hoy lo hace en Estados Unidos” y definirán qué servicios de todo el portafolio serán los primeros en ofrecer desde Querétaro.
De acuerdo con un estudio realizado por AlphaBeta Economics y comisionado por Google, se espera un impacto económico de esta región de $226,000 millones de pesos como contribución al PIB nacional para el 2030. Además de la creación de 117,400 empleos para ese mismo año.
“Queremos que realmente sea una incubadora y espiral de crecimiento para el país”, dijo el director general de Google Cloud México.
“Vamos a muy buen ritmo, sin frenos”
Desde que fue anunciada la primera región de nube de Google Cloud en julio pasado, frente a las autoridades de la Secretaría de Hacienda, la compañía solo ha revelado que se ubicará en Querétaro.
A pregunta expresa sobre más detalles, respondió: “Tengo pocos datos adicionales que compartir porque, si bien ya se está trabajando, no hay una fecha compromiso. Somos muy cuidadosos de esto”.
Velázquez añadió que más allá del sitio y cómo montarla, para su construcción hay otros temas detrás como dependencias, permisos y proveedores. “Puedo decir que vamos a muy buen ritmo y estamos a meses de poderlo anunciar”.
En línea con lo dicho a finales de agosto por el CEO de Google Cloud, Thomas Kurian, respecto a que el proyecto va en tiempo pues su construcción tarda dos años, Velázquez confirmó que “no hay nada que nos esté frenando. Estamos tratando de anticiparlo un poco, un par de meses”.
Sobre cuándo se inaugurará, fue conciso: “2023 no va a ser”. Y agregó: “Tengo varios clientes de banca que me están pidiendo que ya haga el anuncio oficial porque esto viene a resolver algunos temas. Ayuda con el regulador, temas de soberanía, de residencia de datos. Me piden fechas para armar el cronograma de actividades. ¿Crees que no compartiría una fecha, si ya la tuviera clara?”.
Sin embargo, concluyó: “Sabemos de la necesidad, de la urgencia, estamos trabajando a marchas forzadas, queremos hacerlo de manera responsable, con los tiempos adecuados y no calentar el mercado con algo que después no se cumpla. Es importante cumplir las promesas y no crear una falsa expectativa”.