San Miguel de Allende, Guanajuato.- 2020 es de esos años que todos mencionan pero nadie quiere ver llegar. Muchas de las grandes predicciones del mundo IT establecían esa fecha como el hito para la popularización y aparición de variadas tecnologías disruptivas, mientras que las organizaciones también lo han definido como un punto de inflexión para sus estrategias. Ahora que faltan cinco meses para su llegada, ¿se cumplirán las promesas?
Al alero de esa pregunta, el proveedor mexicano de tecnología e innovación, Alestra, reunió a cinco líderes de algunas de las tecnológicas más relevantes de la actualidad para analizar el estado y la evolución de la innovación digital en los últimos años. El panel se enmarcó en el Foro Anual de Innovadores Digitales, primera edición del evento empresarial en el que participan 20 tomadores de decisiones del país, además de socios tecnológicos, para potenciar la transformación de las organizaciones a través de IT e implementar la innovación que inaugure nuevos horizontes de negocios.
En el panel, de nombre “Cuenta Regresiva, Innovación digital frente al 2020”, participaron Ricardo Hinojosa, director ejecutivo de Mercado empresarial de Alestra; Gabriel Muñoz, director de Estrategia de Producto de Alestra; Ricardo Rentería, director de AWS en la región norte de América Latina; Ramón Viñals, director de Ingeniería de Cisco; Eduardo Zamora, director general en México de Fortinet; y Alejandro Lomelín, director de Canales y Alianzas de HPE.
De entrada, lo que está claro es que las predicciones suelen pecar de optimistas. Según refirió Hinojosa los análisis de especialistas indicaban que para 2020 México tendría 200 millones de cultivos conectados a IoT, las máquinas inteligentes serían una de las cinco principales prioridades de inversión para 30% de CIO del país y el 40% de las empresas en América Latina tendrían una estrategia de transformación digital en toda la organización; pero la realidad es muy diferente: 8 millones de objetos conectados a IoT, ausencia de una inversión puntual en IA y solo 27% de las empresas realizan actividades —aún tímidas— de transformación digital.
Los números gruesos no acompañan mucho a las proyecciones generales, pero a nivel interno muchas organizaciones siguen en la carrera por cumplir sus objetivos al 2020. De acuerdo con Hinojosa no todo está perdido, aún cuando hoy las compañías se encuentren en una difícil carrera de velocidad, hay factores que pueden ayudarles a llegar a sus metas. Lo primero es posicionarse en una estrategia ya no de transformación digital sino de innovación digital.
Alestra define este proceso en tres pasos: primero está la Transformación Digital, que es la integración de tecnologías digitales en todas las áreas y procesos del negocio; sin embargo, los clientes de hoy exigen ir más allá de la adopción de las tecnologías digitales, por lo que las empresas requieren crear nuevas experiencias y diseñar nuevos modelos de negocio basados en la innovación y a ese periodo se le llama Innovación Corporativa; finalmente, la Innovación Digital llega una vez que la empresa está capacitada para acelerar la transformación de las personas, los proceso y las herramientas tecnológicas mientras crea nuevas experiencias digitales para satisfacer a los clientes.
¿Cómo moverse más rápido?
Los últimos cinco años han cambiado para todos lo que se entiende por innovación, transformación e incluso el rol del CIO y su departamento. De acuerdo con los panelistas, uno de los responsables más significativos es el propio cliente. “El conjunto de clientes medianos y pequeños que están interesados en las herramientas que habilitan la transformación digital es mucho mayor que hace cinco años. Eso te habla de un cambio en los paradigmas de gestión y de negocio: el shadow IT, por ejemplo, ha vuelto más colectiva la adquisición de servicios y eso obliga al CIO a volverse más listo, a estar más atento a la organización como conjunto”, opina Alejandro Lomelín, de HPE.
Pero no todo depende del director de Sistemas. En palabras de Eduardo Zamora, director general en México de Fortinet, en los últimos dos años se ha generado mucha más conciencia sobre la transformación digital, pero hace falta cambiar la mentalidad de las empresas. “Hoy vemos estrategias incipientes, pero creo que es una responsabilidad social la que tenemos los líderes tecnológicos de empujarla de forma correcta. Hay que transformar desde la base, como los procesos y la cultura empresarial, para que se adapten a la nueva velocidad de las cosas”, indica.
Es justo en la velocidad donde los expertos concordaron que ha evolucionado más el ecosistema. “Hace cuatro o cinco años apenas se hablaba de la nube, y las dudas siempre iban en la tónica de los riesgos y la seguridad. Hoy en día lo que la mayoría de empresas nos preguntan es cómo le hacen para ir más rápido”, opinó Ricardo Rentería, director de AWS en el norte de América Latina.
Pero frente a los objetivos de 2020, ¿cómo meter el acelerador para alcanzarlos? De acuerdo con los líderes de estas compañía generar un roadmap de innovación a corto plazo es clave. Las herramientas existen, los servicios de consultoría y transformación digital también. Lo importante es elegir los que mejor armonicen con la estrategia.
El director ejecutivo de Mercado Empresarial de Alestra, Ricardo Hinojosa, recomendó cuatro acciones puntuales:
- Aceptar la realidad. Si no se tiene humildad la tentación es decir “estoy bien, no estoy siendo atacado, no mi competencia no va más rápido que yo”, eso impide ver la realidad de la situación.
- Ser el disruptor. Que no venga alguien externo a cambiar la industria, el esquema de trabajo y la forma en que la organización sobrevive. “Si tú no te mueves primero y cambiar tu entorno, alguien más lo hará por ti”.
- Cambiar de a poco. Ya no es una época de proyectos millonarios. Muchas organizaciones terminan por estancarse solo por concentrar los esfuerzos en grandes transformaciones, en lugar de reconocer las áreas que más pueden beneficiarse y realizar pequeñas acciones que produzcan cambios más ágiles.
- No hacerlo solo. Ya hay un ecosistema, historias, servicios. Hay que subirse al barco, conocer y cambiar tu empresa con base en ese contexto.
A esto, el resto del panel sumó algunas esenciales: definir con detenimiento los objetivos de transformación digital, informarse profundamente respecto a la oferta de tecnologías disponibles antes de tomar cualquier decisión; y, en suma, perder el miedo y apostar por el cambio. El panorama que aguarda a quienes no se transformen es sin duda más terrorífico que cualquiera que derive de asumir este salto de fe.