No es sorpresa que las empresas cada día generan más información. Esta tendencia no hará más que profundizarse en los próximos años, y los problemas asociados a este “mal de diógenes” de los datos no son menores: reducción de productividad general, mayor probabilidad de sufrir problemas de seguridad, gastos elevados en almacenamiento y energía, junto a un largo etcétera. ¿La buena noticia? Es posible romper estos hábitos y hacer de la información un recurso eficiente para su organización.
Está a un clic de distancia de saber cómo explotar la información en su organización. Solo debe llenar un pequeño formulario para aprender a utilizar los datos, ahora identificados como el nuevo petróleo de los negocios.
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